martes, 25 de marzo de 2008

Recuerdo


Recuerdo tu cara, tus manos que se movían distinto, tus gestos, la curva de tu cabeza, tu mirada de niño herido y abandonado.
Recuerdo tu mirada fría, tus pequeños desaires, tu no querer quererme.
Recuerdo mi propia necesidad de ser querida y necesitada, mi propio dolor casi doblando mi espalda, no por tí, ya venía ahí antes de conocerte.
Pero ya no recuerdo tu olor, ya no recuerdo tu sabor.
Aún te reconozco en algunos que me cruzo en la calle, pero más como algo que pudo ser hermoso pero no se cumplió.